Escribe: Cristóbal Suárez
¿Cómo nos puede ayudar el trabajo de un psicólogo nacido en 1896 en la ciudad de Orsha (actual Bielorrusia) para entender el aprendizaje en y con Internet? Así planteado hablamos de Lev S. Vigotsky cuyos trabajos sirven, sustancialmente, para entender que el aprendizaje –con y sin adjetivos- entraña una explicación social y cultural.
¿Cómo nos puede ayudar el trabajo de un psicólogo nacido en 1896 en la ciudad de Orsha (actual Bielorrusia) para entender el aprendizaje en y con Internet? Así planteado hablamos de Lev S. Vigotsky cuyos trabajos sirven, sustancialmente, para entender que el aprendizaje –con y sin adjetivos- entraña una explicación social y cultural.
Para esta visión, lo social y lo cultural dejan de ser sólo campos de aplicación y pasan a ser parte de la explicación de la naturaleza humana. Esto implica un giro en la visión educativa. Esto es, la sociedad y la cultura no son aspectos secundarios en el desarrollo cognitivo, son aspectos que en definitiva crean, configuran y hacen posible lo específicamente humano en el individuo.
En apretadas líneas, el aprendizaje para la teoría sociocultural es un proceso de reestructuración subjetiva que no se genera ni en un vacío social ni es ajeno a la cultura. Para la teoría sociocultural la mente opera indirectamente (mediación) gracias a la intervención de los medios auxiliares de origen cultural que se dan en condiciones sociales.
Concretamente, el aporte de la teoría socio cultural nos permite distinguir que el aprendizaje:
- Se origina y estimula dentro de un proceso de mediación extendido en una red de interrelaciones sociales.
- Se genera en virtud de la influencia y apropiación reconstructiva de los instrumentos de mediación cultural, del empleo de signos y herramientas.
Esto permite ver que todas nuestras funciones mentales son funciones mediadas socioculturalmente. No existe, por tanto, aprendizaje fuera de la red de interacciones sociales, ni ajena al ejercicio de la cultura… Esto también tiene que ver con Internet.
Aprender en y con internet lleva el rasgo de la cultura digital y de las interacciones medidas tecnológicamente.
Es decir, que en la relación educación e Internet, siguiendo lo anterior, no hay que perder de vista que:
- Internet no es sólo un medio sofisticado, sino que configura un auténtico entorno de acción social que opera como condición y motor de aprendizaje.
- Internet no sólo integra aplicaciones, sino que aporta las herramientas operativas y simbólicas con que pensamos y actuamos, y con lo que reconstruimos la cultura.
La explicación sociocultural nos debe llevar a pensar que el aprendizaje implica una naturaleza social y una instrumentalización cultural… también en y de Internet, claro está. Por ello es necesario percibir que toda reestructuración subjetiva, el aprendizaje, implica a más de uno y lleva el rasgo particular del instrumento con que se actúa. Como señala Vigotsky “toda la actividad depende del material con el que opera” (2000, 129). Este punto es materia de otro desarrollo, aprendizaje con y de tecnología.
Por eso Internet no es una entelequia, todo lo contrario, configura una experiencia social y cultural valiosa para las personas que discurren en sus marcos de acción. Internet ofrece un entorno social y dinamiza una práctica cultural donde se inscribe la vida de muchas personas y, con ello, sus oportunidades y limitaciones al momento de aprender.