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miércoles, 30 de julio de 2014

Sobre la oportunidad abierta y cooperativa de aprender en red

Publicado por: Cristóbal Suárez Guerrero (Universidad de Valencia)


Este post llega con retraso. Ahora que se cierra el curso me animo a no dejar pasar este último día para presentar, por un lado, el libro Aprendizaje abierto y aprendizaje flexible. Más allá de formatos y espacios tradicionales, editado por la Administración Nacional de Educación Pública de Uruguay y el Plan CEIBAL y, por otra parte, presentar algunas ideas del capítulo que escribí para esta publicación “La oportunidad abierta y cooperativa de aprender en red”.

El libro está disponible íntegramente online y de forma gratuita.

1. El libro contiene trece capítulos y busca, visto el desarrollo tecnológico en la educación, recuperar el debate pedagógico. Como tal, el libro ofrece distintos puntos de vista sobre diversos enfoques y experiencias pero mantiene una constante: ofrecer un punto de reflexión que estimule la construcción de la teoría, el desarrollo de la práctica y la visualización de líneas investigación comprometidas con una visión educativa. No se trata de presentar tecnología, sino pensar lo educativo con la tecnología sabiendo que el ideal educativo, como se señala en el prólogo, es “democratizar el conocimiento y contribuir a lograr una verdadera sociedad de aprendizajes”.

Por ello, el contenido del libro se organiza en 4 ejes: “Comunidades constructoras de contenidos, nuevos y viejos enfoques educativos para tecnologías emergentes, medios interactivos y aportes de la tecnología a los procesos de evaluación” y se desarrollan en los siguientes 13 capítulos:
Capítulo 1: Escuelas nodo, aprendizaje distribuido y trabajo colaborativo del profesorado. Joaquín Gairín Sallán y David Rodríguez-Gómez.
Capítulo 2: Comunidades de aprendizaje. Entre la innovación, el conocimiento y las tecnologías. José Miguel García, Dánisa Garderes, Fabián Martínez y Mª del Lourdes Quinteros.
Capítulo 3: La oportunidad abierta y cooperativa de aprender en red.Cristóbal Suárez Guerrero.
Capítulo 4: Aprendizaje colaborativo, dispositivos híbridos y pedagogía. Hugo Nervi Haltenhoff.
Capítulo 5: Los entornos virtuales de aprendizaje y los MOOC. ¿Innovación o moda retro? Nancy Peré.
Capítulo 6: Interacción mundo físico-mundo digital. Ambientes para su aprendizaje. Andrea Cabot Echevarría y Adriana Durquet.
Capítulo 7: Dispositivos tecnopedagógicos en línea. Medios interactivos para aprender. Gisela Schwartzman, Fabio Tarasow y Mónica Trech
Capítulo 8: Videoconferencia y espacios virtuales. Una mirada pedagógica desde la experiencia del Plan CEIBAL. Martina Bailón y Mariana Montald.
Capítulo 9: “CEIBAL en Inglés”. Enseñanza de inglés por videoconferencia en Educación Primaria. Claudia A. Brovetto.
Capítulo 10: Ser parte de una caja de oportunidades. La televisión interactiva. Martín Papich
Capítulo 11: La evaluación en la educación de la Sociedad del Conocimiento. Miguel Zapata-Ros.
Capítulo 12: La evaluación de los aprendizajes en línea en clave de innovación. Andrés Peri Hada y Nicolás Alonso.
Capítulo 13: Fichas de proyectos de aprendizajes y tecnologías en el contexto uruguayo.
2. Ahora bien, con el sesgo que supone esto, me animo a recuperar algunas ideas del capítulo que toco redactar:
Suárez, Cristóbal (2013). "La oportunidad abierta y cooperativa de aprender en red", en García, José Miguel y Rabajoli, Graciela (comps). Aprendizaje abierto y aprendizaje flexible. Más allá de formatos y espacios tradicionales. Uruguay: Administración Nacional de Educación Pública - CEIBAL. La idea es invitar a profesores y distintos especialistas en el desarrollo educativo con tecnología a debatir sobre algunos puntos. Aquí algunos extractos:
“… usar internet en el aula, como aula o como complemento de la misma, no consiste en añadir un nuevo mobiliario educativo, consiste en desplegar un conjunto de acciones educativas en un entorno social, cultural y tecnológicamente enriquecidos”.

“Por tanto, y más allá de la anécdota instrumental que significa usar tal o cual herramienta web –Twitter, Facebook o YouTube–, hablar del aprendizaje en internet implica hablar del aprendizaje alojado en un entorno educativo organizado en red”.

“Cuando aprendemos no lo hacemos como abstracciones sumidas en un vacío. El aprendizaje ocurre siempre bajo condiciones sociales y culturales –por ejemplo, el aula de una escuela– que dan cabida al sujeto y al conjunto de interacciones que condicionan su aprendizaje... En internet, el entorno sociocultural donde se aloja el aprendizaje es un entorno en red”.
 “No basta con pensar en las herramientas, hace falta pensar en un entorno en red, y con ello en la conectividad, para detectar las oportunidades educativas en internet”.

“¿Cómo encarar el reto educativo que abre internet? Aquí, de entre muchas opciones, formulamos algunas ideas:
Primero, asumir de una vez por todas, que internet no es un elemento neutro en la educación, ya que al abrir el acceso a la información y a la coordinación humana bajo unas características tecnológicas específicas, configura un entorno educativo particular de aprendizaje.

Segundo, de forma consciente o no, internet ya es parte de los modos de representación del aprendizaje así como de los modelos pedagógicos con los que se piensan la educación, fuera y dentro de la escuela.

Tercero, la ventaja educativa que se pueda encontrar en internet no llegará únicamente como innovación tecnológica, será preciso pensar educativamente la tecnología”.
“El aporte de internet a la educación consiste en la reconfiguración de dos nuevas condiciones de aprendizaje. Por un lado, la reconfiguración de las condiciones sociales en red y, por otro, de las condiciones culturales abiertas. Ambas condiciones permiten hablar de la oportunidad abierta y cooperativa del aprendizaje en red: internet entraña tanto la oportunidad del aprendizaje abierto a partir de los ingentes recursos culturales de acceso global, como del aprendizaje cooperativo a partir de distintos flujos de comunicación que permiten la coordinación entre alumnos... Estos temas forman parte de la nueva cultura digital de la escuela y de la educación”.

“La escuela es una variante –organizada, secuencial o normativa– de la experiencia de aprender. Pero en la actualidad, tanto las experiencias informales como no formales no son solo caminos secundarios de aprendizaje, sino que en algunos casos pueden ser fundamentales para la formación personal. Pero ¿por qué se afianza con mayor fuerza la idea de aprender más allá de la educación formal?”.

“Ya que los entornos en red ofrecen la posibilidad digital de registrar, almacenar, buscar, procesar, trasmitir, crear, valorar, compartir o recuperar contenidos de una forma deslocalizada y en red, las líneas que separaban la educación formal, no formal e informal se solapan progresivamente”.

“Buena parte de las visiones sobre el aprendizaje abierto en la escuela supone pensar el currículo educativo como punto de inicio y retorno del aprendizaje. Por tanto, para tomar ventaja cultural de la red en el aprendizaje abierto, la escuela puede flexibilizar el carácter estructurado de sus actividades ampliando las oportunidades de aprendizaje a través de Recursos Educativos Abiertos (REA), Open Educational Resources (OER), básicos para hablar de contenidos educativos en red y, con ello, de la oportunidad de aprendizaje abierto”.

“Un OER entraña tanto una oportunidad de aprendizaje como una oportunidad de enriquecimiento de la cultura. Para poder aprender de forma abierta no basta con entrar a internet, hace falta ser selectivo con el material. Por tanto, para que el aprendizaje abierto sea una oportunidad hace falta acercarse a los mejores contenidos de aprendizaje que, en mayor o menor medida, se cifran en los OER”.

“Sin embargo, la idea no es llenar la experiencia de aprendizaje de múltiples Recursos Digitales Abiertos (REA). El centro del aprendizaje abierto no es la tecnología, sino pensar en cómo cobra significado para el aprendizaje de los estudiantes. Por tanto, la tarea docente de cara al aprendizaje abierto también consiste en redescubrir el valor de lo extracurricular, de lo no directivo y de la cultura de la colaboración en red para pensar en otras oportunidades de aprendizaje”.

“La oportunidad del aprendizaje abierto, de ir más allá de la educación formal, es necesaria y consustancial a un entorno educativo en red. Pero en este proceso, ¿basta con ir solo? En un escenario cultural en red, como el que describe internet, además de la exuberante información y de los REA, existe una condición de aprendizaje complementaria con el aprendizaje abierto: se puede interactuar, coordinar, pensar o fluir con otros en distintas direcciones, con distintos lenguajes y, técnicamente, de todos a todos”.

“De la misma forma en que los datos y la información distribuidos en internet no bastan para el aprendizaje, la sola capacidad de interactuar en red no es suficiente para aprender. Para aprovechar el desarrollo social que se experimenta en internet es preciso dar un salto cualitativo en la forma de representar la interacción educativa. Este salto nos debe permitir ver en la interacción social, global, abierta y en red, oportunidades de coordinación grupal que sean interdependientes y significativas para la experiencia de aprendizaje. Se trata de pasar del ruido de la multitud en red a la música de la coordinación humana en grupos”.

“Pues bien, el aprendizaje cooperativo y el aprendizaje abierto no son excluyentes entre sí, son más bien parte de un mismo proceso que se complementan en red”.

“Por tanto, si lo que se busca es mejorar las condiciones sociales de aprendizaje en red a través del aprendizaje cooperativo, es preciso que los docentes asumamos por lo menos dos tareas iniciales en este proceso. Por un lado, formar parte activa de los flujos de comunicación y de la dinámica de creación colectiva en internet para entenderlas desde adentro y, por otro, comprender que la unidad de acción educativa para pensar la cooperación en red no es el estudiante, menos la tecnología, sino la noción de equipo de aprendizaje en red”.

“La “autocomunicación de masas” basada en la bidireccionalidad colectiva y creativa en red es un rasgo que hace idónea la idea de la cooperación en el aprendizaje abierto”.

“… el modelo con que actuamos y pensamos internet hoy en día es marcadamente social, pero no por ello es cooperativo”.

“Sobre estos “modos de hacer, pensar y sentir” en red es donde se instalan la cooperación y el aprendizaje cooperativo en internet. Pero no se trata de descubrir la cooperación a costa de internet, cosa inaudita sabiendo que la cooperación es una forma ancestral, básica y estratégica de desarrollo humano y que no es patrimonio del artefacto. Se trata más bien de pensar que las características de un entorno en red abren opciones organizativas y comunicacionales para repensar el papel de la cooperación y el poder de los equipos de aprendizaje como parte de la cultura educativa”.

“Pensar en la interacción social en red desde la Zona de Desarrollo Próximo (ZDP) añade ese plus pedagógico que permite ver en la interacción la posibilidad de coordinación recíproca”.

“Para entender la cooperación como motor de aprendizaje hace falta entender la acción del equipo cooperativo”.

La oportunidad abierta y cooperativa de aprender en red. ANEP-CEIBAL from Cristóbal Suárez

Este post ha sido publicado originalmente en Educación y Virtualidad. Autorizada por el autor su publicación en este Blog CUED.  

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