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martes, 30 de octubre de 2012

30 días, 30 redes sociales. Las conclusiones.

Escribe: Carlos Bravo


En los dos últimos artículos  expliqué sobre la organización y los documentos generados en el primer curso abierto y en línea en la Red CUED

Resta analizar la evaluación del curso y las opiniones de los participantes. Como señalé anteriormente tuvimos la inscripción de 44 personas, de ellas 30 activas.  En total representamos a 10 países; Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Costa Rica, Colombia, España, México, Perú y Venezuela.

En el curso se crearon cuatro foros donde se comentaron las actividades semanales y se expusieron valoraciones sobre los resultados del curso. Sin embargo consideramos necesario recoger las opiniones y criterios en un formulario, empleando dicho recurso de Google. El formulario tuvo las siguientes preguntas:

  • Emplea tres palabras para describir la utilidad del curso en tu formación profesional.
  • Durante el curso creamos varios documentos compartidos con Google Drive. En tu opinión los documentos son:   Fáciles de emplear, Difíciles de acceder, Es demasiada la cantidad de documentos, No conocía este servicio de Google
  • En tres palabras describe el trabajo del profesor del curso
  • Como evaluarías tu participación en el curso.
  • Cuáles otros temas consideras puedan ser tratados como cursos abiertos en nuestra Red CUED
  • Estarías dispuesto a crear un curso abierto para la Red Cued.
  • Si anteriormente respondiste afirmativamente, cuál curso estás dispuesto a desarrollar
  • Comenta cualquier otro detalle que no esté reflejado en la encuesta

Los resultados se pueden apreciar desde este enlace 

En las dos nubes de palabras que adjunto se recogen las opiniones a dos de las preguntas: la utilidad del curso y el trabajo del profesor. 
Evaluación del curso

Como se puede apreciar las opiniones reflejan la necesidad del curso, el sentido innovador que tiene este tipo de actividad, así como el impacto en el aprendizaje de cada participante.

Evaluación al profesor
Los asistentes al curso además de expresar su satisfacción por el curso, propusieron variados temas posibles a desarrollar en la Red CUED. Entre estos están el empleo de las redes sociales en otros ámbitos, como la salud, el trabajo, la ciudadanía, la planificación  de cursos on-line, el desarrollo de materiales didácticos para cursos on-line, la alfabetización digital, entre un amplio número de propuestas que se pueden consultar en el enlace a la encuesta. 

Como parte del curso se creó el cubo de las redes sociales donde con códigos QR se puede acceder a todos las redes analizadas. Este tipo de medio tridimensional es una manera de vincular varios recursos.

Para concluir es importante señalar que los objetivos del curso se cumplieron, demostrando que es posible desarrollar un curso abierto y en línea en la plataforma de la Red CUED, la casa grande de la educación a distancia.

martes, 23 de octubre de 2012

30 días, 30 redes sociales. Documentos elaborados

Escribe: Carlos Bravo


En el comentario anterior se analizó la preparación del curso abierto y a distancia “30 días, 30 redes sociales” que durante cuatro semanas se desarrolló en la Red CUED. 

Una vez definido tanto la necesidad del curso, los participantes y los objetivos pasamos a establecer los contenidos, métodos y medios, siguiendo la estructura didáctica de toda actividad de aprendizaje. 

En este curso no existía un contenido previamente elaborado por el profesor, como suele suceder en la mayoría de las formas de organización abiertas o no. La tarea inicial del profesor fue, además de la planificación, crear un grupo de documentos para el trabajo posterior. Estos documentos se convirtieron en la base del curso y se emplearon desde los métodos grupales.  

Consideramos que el trabajo en grupo fue el mejor conjunto de métodos empleados en este curso. Se organizaron a partir de la selección de los roles que cada participante estaba dispuesto a encarar y estos a su vez estaban explicados en uno de los documentos previamente elaborados por el profesor. 

Los roles creados son: escritores, compiladores, evaluadores y responsables de la semana.

Los escritores son los que seleccionaron las redes para su análisis, es el rol más numeroso y el que más actividad tuvo. No existía lista inicial, cada uno seleccionó la red que quiso apoyado en su experiencia. 

Los compiladores tuvieron a su cargo la revisión en detalle de lo elaborado por los escritores, mejorando el estilo narrativo. En este caso varios participantes trabajaron en ambos roles.  

Los evaluadores tenían la  tarea de evaluar el trabajo de cada semana y para ello debían crear varios indicadores evaluativos. El último de los roles los responsables de la semana, tenían como tarea principal velar por el cumplimento de las actividades semanales, coordinar con los evaluadores para establecer los indicadores y realizar un informe de los avances del curso, así como proponer soluciones y nuevas ideas. Estos dos roles tienen tareas importantes, pero en la práctica del curso no tuvieron actividad alguna, lo que se debe a que no quedaban más personas con roles sin seleccionar.

La matrícula en este curso fue por invitación y se tomó en cuenta a los primeros 40 que respondieran a la solicitud que se hizo en la Red. Al final se extendieron invitaciones a 50 personas, de las que se inscribieron 44 y finalizaron alrededor de 30, lo que es un buen número para este tipo de curso. Cabe destacar que de los 44 inscritos, cinco personas se disculparon para no participar por razones de trabajo o de otro tipo no previstas.

La organización en la Red CUED.

La Red CUED se estructura con los servicios de Ning que es una conocida plataforma donde se pueden crear grupos, foros de discusión, blogs, comentarios, enviar correos entre otras de sus  posibilidades. 

El curso se desarrolló en un grupo cerrado, con invitación directa, esto con el objetivo de lograr una adecuada participación y en especial un mejor trabajo de los roles. Se crearon cuatro foros, uno por semana, que al finalizar la semana se cerraba para dirigir la atención a las tareas de la siguiente etapa. En total se hicieron cerca de 300 comentarios tanto en los foros, como en los documentos compartidos, lo que significa alrededor de 10 comentarios por los participantes activos.

Además de los foros, se crearon varios documentos, que como se comentó fueron la base del trabajo cooperado. Todos ellos a partir de Google Drive, que es una excelente herramienta para el trabajo grupal. Dichos documentos  los agrupé en dos áreas; selección y cooperación

En la primer área están las hojas de cálculo para seleccionar los roles antes mencionados y en la segunda los documentos de cooperación. Estos por su contenido son los más productivos, debido a que en ellos se plasmaron las opiniones y valoraciones del trabajo en las redes. 

Para acceder a todos los documento haz clic aquí
El esquema ayuda a comprender gráficamente los documentos y a establecer las relaciones entre cada uno de ellos. 

En el mapa se incluyen los enlaces a todos los documentos, habilitados para consultar y opinar libremente. 

Por último se trabajó con una libreta compartida en EverNote, para conformar una especie de biblioteca sobre contenidos y artículos de interés en torno a las redes sociales. Sin embargo el poco conocimiento de este recursos hizo que pocos lograran un empleo satisfactorio.


En resumen la actividad del curso permitió crear un excelente análisis del empleo de las redes sociales en la actividad educacional. En un próximo comentario explicaré sobre las opiniones de los participantes, recogidas en un formulario.

lunes, 22 de octubre de 2012

Aprendizaje en entornos colaborativos

Escribe: Paola Dellepiane

Conceptos como aprendizaje cooperativo y aprendizaje colaborativo son característicos de la práctica educativa.

Hitz (citado en Cabero y Román, 2006), define aprendizaje colaborativo como “un proceso de aprendizaje que enfatiza el esfuerzo cooperativo o de grupo entre los docentes y los estudiantes, la participación activa y la interacción por parte de estudiantes y profesores, y el conocimiento que emerge desde un activo diálogo entre los participantes compartiendo sus ideas e información” (Cabero y Román, 2006:39).
Por otra parte, Cabero (2003) unifica las vertientes de aprendizaje colaborativo y cooperativo en una definición única, estableciendo el aprendizaje colaborativo como “una metodología de enseñanza basada en la creencia de que el aprendizaje se incrementa cuando los estudiantes desarrollan destrezas cooperativas para aprender y solucionar los problemas y acciones educativas en las cuales se ven inmersos” (Cabero, 2003: 135).

De estas definiciones, creo que es posible hablar de un proceso de producción colaborativa del conocimiento, en el cual aprender un nuevo conocimiento es el resultado de la interacción con otros. Podemos también ver que la construcción colaborativa da cuenta de un proceso de indagación, de formulación de preguntas por parte de los estudiantes que los lleve a avanzar en la adquisición de un nuevo conocimiento a partir de la síntesis y evolución de conocimientos dados, y aquí creo pertinente retomar a Dewey, y sus pensamientos sostenidos a principios del siglo XXI, considerando “la experiencia” como resultado clave de una situación educativa.
Existe también una fuerte importancia de “lo social” en el aprendizaje centrado básicamente en el intercambio comunicativo. Así, es posible mencionar algunas premisas al respecto (Gros, 2008: 88)

  • El aprendizaje responde a la dinámica del sistema cognitivo y se produce dentro de la persona.
  • El aprendizaje se produce en las personas pero pueden adquirir conocimiento de diferentes maneras, incluido el aprendizaje en colaboración.
  • Los grupos también aprenden y lo hacen diferente a los individuos, aunque el conocimiento generado estará siempre en la mente de los sujetos.
  • Los grupos también pueden construir un conocimiento que los sujetos no pueden crear por sí solos por un efecto sinérgico que mezcla las ideas de las diferentes perspectivas individuales.
  • Los grupos construyen un conocimiento que puede no estar en ninguna de las mentes individuales, pero puede lograrse interactivamente en el discurso del grupo y persistir en artefactos físicos y simbólicos.
  • Todo aprendizaje es fundamentalmente social, situándose el conocimiento en una historia y una cultura dada.
  • El aprendizaje es siempre una mezcla de procesos individuales y grupales.

Así, podemos llegar a considerar un modelo de aprendizaje colaborativo que trasciende la problemática académica de adquirir información, procesarla e incorporar nuevas destrezas para vincular el conocimiento a las relaciones sociales: La colaboración entonces, como estrategia de aprendizaje, supone un cambio en el modo de analizar y valorar los logros de los aprendizajes.
De lo dicho, es posible concluir que el aprendizaje colaborativo no necesita de un “soporte tecnológico” para que podamos ponerlo en práctica. Sin embargo, creo que tampoco está sujeto a discusión que los entornos tecnológicos son espacios propicios para la puesta en marcha de proyectos colaborativos y conformación de comunidades de aprendizaje.

Dejo entonces como interrogante para seguir analizando: ¿cómo pensar el diseño de entornos mediados tecnológicamente que permitan el aprendizaje intencional y la construcción colaborativa del conocimiento?

¿Qué falta?... y ¿qué sobra en la linea del tiempo del elearning?

Escribe: Miguel Zapata Ros

Recientemente Grainne Conole ha puesto en su perfil de Facebook esta imagen y en relación con ella ha preguntado:

  • ¿Está de acuerdo? 
  • ¿Hay algo que falta?


Se han producido varias respuestas de distinto tipo. Entre ellas recomiendan un paseo por la historia del aprendizaje en línea:http://scienceoftheinvisible.blogspot.co.uk/2012/08/a-ramble-through-history-of-online.html Pero rescatamos las que parecen más interesante con traducción rápida.

Stephen Downes propone Objetos de Aprendizaje y Learning Design, como los items que faltan.

Ante la propuesta de Grainne de fusionar las categorías de REA (Recursos Educativos de Aprendizaje o en inglés OER, Open Educatinal Resources)  y objetos de aprendizaje (OA u o LO, learning objects), Stephen Downes replica que: REA y objetos de aprendizaje son dos conceptos muy diferentes. Y  los objetos de aprendizaje están  todavía muy en uso, probablemente más que los REA.

Grainne Conole 
,
aunque está de acuerdo con Stephen en que es un buen punto, objeta que los LOs parece haber desaparecido, ahora es el de los REA el discurso dominante.
Finalmente Grainne Conole acepta: Bien Stephen tendrá un think  acerca de esos puntos. "tienes razón, hay herramientas específicas LD así que tal vez se necesiten.  Pero si incluimos los LOs ¿dónde los colocamos?


Ésta es una discutible opinión de Downes. Hay trabajos de Wiley  (2000) y Merrill (2000) previos donde se habla de Learning Objects, y del propio Merrill anteriormente (1990, 1998 y 1996) hablando de Objetos de Conocimiento.
Prosigue una discusión entre Grainne y Downes sobre la ubicación temporal de esos conceptos y desarrollos de herramientas o teóricos. Naturalmente no se alude al Diseño Instruccional general, no específicamente tecnológico que tiene gran tradición anterior a este año entre los pedagogos, los psicólogos del aprendizaje o en general los teóricos del conocido como dominio propio Diseño Instruccional. Ni a autores que no sean propiamente del dominio anglosajón como puedan ser, además de los clásicos, Dai  Griffiths (ver http://www.um.es/ead/red/M5/griffiths16.pdf)

Lamentablemente cuando he accedido a Facebook no he visto, no era visible la parte anterior de la discusión porque Fb sólo muestra los últimos comentarios, y he escrito lo que sigue. Es evidente que lo he hecho con una notable metedura de pata porque he ignorado cosas ya dichas. Pero eso no evita el fondo de la cuestión planteada: Lo efímero de las apreciaciones y de las predicciones en este tema, que luego rápidamente olvidamos, y también he insistido en las ausencias señaladas por Downes, aunque con un sentido distinto, el que ya he señalado:

Miguel Zapata-Ros No sé quien lo ha hecho [era obvio que Grainne, pero lo precipitado me ha llevado a ignorarlo] pero sobran varias cosas y faltan otras. Lo que quizá nos dé idea de lo efímero de las modas en e-learning. En un momento parecía que los learning objects eran lo definitivo, en otros lo PLE. En los años 80s todas las investigaciones auguraban un futuro magnífico al video disco interactivo (CDI). Lo que sobra son los mundos virtuales. ¿Alguien puede compartir una experiencia generalizada?

La pregunta sigue en pie. No digo que no exista, me gustaría conocer respuestas afirmativas, pero ¿alguien conoce de forma documentada y difundida comme il faut una experiencia educativa de mundos virtuales que se haya implementado y se haya generalizado a un entorno aunque sea muy restringido?

Al final mi aportación a esta línea de tiempo, porque creo que hay que contribuir positivamente, es:

Miguel Zapata-Ros Resumiendo: Debería haber una categoría que integrase Objetos de Aprendizaje, y su organización pedagógica en el elearning: Diseño Instruccional, secuenciación, evaluación, etc. Y que fuese diferenciada del resto. Y sacaría los mundos y la realidad virtual por carecer de relevancia en la práctica concreta generalizada.

Post data: 

Después de escribir esta entrada he visto, porque la propia autora lo comunicó en Twitter, la presentación (magistral como no podría ser de otra forma) de Keynote en EDEN.

Fíjense en el título y en el contenido y relaciónenlo  con el contenido del debate en FB.
Inteligente estrategia: La línea cronológica, utilizada en la presentación, elude como item al diseño instruccional, cuestión que se echa en falta entre otros por Downes y por quien escribe., para  a continuación centrar la presentación justamente en ese tema: La enseñanza como la ciencia del diseño (Teaching as design science)

No he podido resistir y he añadido este último comentario:

How clever! smile
Grainne was preparing his lecture for EDEN. Just Look at the title and content.
This is called the Socratic method.


Referencias

Griffiths, D.  Blat, J. Garcia, R. Sayago, S. (2005, Junio). La aportación de IMS Learning Design a la creación de recursos pedagógicos reutilizables. RED. Revista de Educación a Distancia,  número monográfico II. Consultado (día/mes/año) 2005 en http://www.um.es/ead/red/M5/
Jones, M.K., Li, Z. & Merrill, M.D. (1990).  Domain knowledge representation for instructional analysis. Educational Technology,   30(10), 7-32.
Merrill, M. David & ID2 Research Team (1996).  Instructional Transaction Theory: Instructional Design based on Knowledge Objects.  Educational Technology, 36 (3), 30-37
Merrill, D. (1998) Knowledge Objects. Utah State University. CBT Solutions Mar/Apr 1998 1-11. http://mdavidmerrill.com/Papers/KnowledgeObjects.PDF
Wiley, D. (2000) LEARNING OBJECT DESIGN AND SEQUENCING THEORY. http://opencontent.org/docs/dissertation.pdf


miércoles, 17 de octubre de 2012

30 días, 30 redes sociales. Un curso entre todos

Escribe: Carlos Bravo


Recientemente finalizó el primer curso en la plataforma de la Red CUED, con el título “30 días, 30 redes sociales” donde se admitió la inscripción de 50 personas.

Una vez terminado el curso se impone un análisis de los resultados, con el objetivo de servir de base al desarrollo de otros cursos que de seguro se impartirán en nuestra Red. En este primer trabajo comentaré sobre la preparación inicial del curso. 

Lo primero a considerar es cómo identificar el curso; es un MOOC (massive online open course),  o un Recurso educativo abierto (OER) o simplemente un curso abierto.

Los MOOC son los cursos que se imparten con carácter regular o formal en instituciones educacionales y que se “abren” mediante la Red a la participación masiva. En otras palabras cuentan con un conjunto de documentos previos, medios y métodos probados en otras situaciones y con un personal entrenado y con experiencia en el tema tratado.

Nuestro curso no puede inscribirse en ese criterio, no cumple con ninguna de las características señaladas. Me inclino a considerarlo como un curso abierto, donde un grupo de interesados se reúnen para opinar sobre un tema único y en conjunto arribar a conclusiones que quedan plasmadas en varios documentos, abiertos a la lectura de todos los interesados. Es esta última cualidad la que me permite su catalogación.

Añado que su desarrollo toma como base a la educación a distancia, al tomar en cuenta los indicadores citados en un reciente trabajo del Dr Lorenzo García Aretio. En él se establecen cuatro importantes características; separación en el tiempo y el espacio, trabajo independiente de los participantes, comunicación mediada a través de varios recursos y el respaldo de una organización.  Por tal razón inscribimos el curso “30 días, 30 redes” dentro de un ambiente abierto y a distancia.

El segundo aspecto a considerar en el análisis es la organización y estructura del curso. Al igual que en cualquier otra forma de superación el curso “30 días, 30 redes sociales” tuvo una base organizativa de carácter didáctico que parte desde la necesidad, la caracterización de los participantes, la determinación de los objetivos, hasta la selección de métodos y medios.

La necesidad del curso se demostró a partir de los variados comentarios emitidos en tres publicaciones anteriores en este blog (Moodle de un lado y las redes socialesdel otro), además de la gran cantidad de opiniones que se pueden leer en la RedCUED tanto en su blog, como en los enlaces a otros trabajos, videos y diferentes medios sobre las redes sociales. 

Los participantes del curso, pertenecen a la Red CUED, profesionales que dedican parte de su tiempo a la educación a distancia, por lo que la mayoría tienen experiencia en el campo educacional.
Con los anteriores campos de trabajo establecidos se diseñaron dos objetivos para el curso: 

  • Valorar la importancia de las redes sociales en la actividad educacional a través del análisis de sus características y funciones.
  • Demostrar la utilidad del desarrollo de un curso abierto en la red social de la Cátedra UNESCO de Educación a Distancia (Red CUED).

Consideramos que ambos objetivos se cumplieron. El primero de ellos se evidencia con la creación colectiva de dos documentos importantes. En estos se analizan desde cuatro indicadores principales el uso de las redes en la actividad educacional.  

El segundo objetivo también cumplido durante el curso, demostró a partir de las diferentes intervenciones en los foros de discusión y en los restantes documentos procesados que es posible desarrollar un curso abierto en nuestra Red. 

En un próximo trabajo comentaré sobre el desarrollo del curso, partiendo de los documentos creados y los métodos utilizados durante el curso.

 García Aretio, LorenzoQué es educación a distancia. http://aretio.hypotheses.org/203